El sedentarismo se ha convertido en una de las principales causas de enfermedades crónicas en todo el mundo. Nuestro estilo de vida cada vez invita más a la inactividad: dejar que “nos distraigan” en lugar de entretenernos por nosotros mismos, echarnos al sofá porque nos sentimos cansados, coger el coche para ir a todos lados…

La falta de actividad física puede tener efectos devastadores en nuestro cuerpo y mente. En este post, hablaremos sobre los riesgos negativos del sedentarismo y cómo podemos combatirlo para mantenernos saludables y en forma.

El sedentarismo aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares

En primer lugar, el sedentarismo puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, tales como la hipertensión arterial, la enfermedad coronaria y el accidente cerebrovascular. Cuando no nos movemos lo suficiente, nuestro cuerpo pierde la capacidad de regular la presión arterial y la circulación sanguínea. El corazón es un órgano potente que debe ser trabajado regularmente para que no pierda sus capacidades.

Además, el sedentarismo puede aumentar el nivel de colesterol y la inflamación en el cuerpo, lo que puede dañar las arterias y causar enfermedades cardiovasculares. Es importante entender que el ejercicio sirve no sólo como una herramienta para perder peso, sino como un sistema regulador de nuestro metabolismo.

El sedentarismo aumenta el riesgo de obesidad y diabetes tipo 2

Por otro lado, el sedentarismo puede aumentar el riesgo de obesidad y diabetes tipo 2. La falta de actividad física disminuye el gasto calórico y la capacidad del cuerpo para controlar los niveles de glucosa en la sangre. Cuando consumimos más calorías de las que quemamos, nuestro cuerpo comienza a almacenar la energía extra en forma de grasa, lo que puede llevar a la obesidad. Además, la falta de actividad física puede disminuir la sensibilidad a la insulina, lo que puede llevar a la diabetes tipo 2.

Estas patologías conllevan altos riesgos para nuestra salud, e influyen severamente en nuestra calidad de vida. Es importante dejar de normalizar estas condiciones e intentar ponerles un remedio para mantenerlas bajo control.

El sedentarismo puede hacer que estés más triste sin saber por qué

El sedentarismo puede afectar la salud mental y emocional, no solamente a nivel físico. Cuando no hacemos suficiente actividad física, nuestro cuerpo produce menos endorfinas, las hormonas que nos hacen sentir bien y felices.  Esto aumenta nuestros niveles de estrés y ansiedad, afectando a nuestra salud mental y emocional.

El sedentarismo es uno de los causantes principales de osteoporosis y debilidad muscular

Además, el sedentarismo puede afectar la salud ósea y muscular. Cuando no hacemos suficiente actividad física, nuestros músculos se debilitan y se atrofian. Además, la falta de actividad física puede disminuir la densidad ósea y aumentar el riesgo de osteoporosis.

Nuestro cuerpo es un organismo vivo, no una máquina. Cuando lo usamos, lo estimulamos para adaptarse, no se “desgasta” más. 

El sedentarismo disminuye la calidad del sueño y puede generar insomnio

Por último, el sedentarismo puede afectar la calidad del sueño. La falta de actividad física puede aumentar la dificultad para conciliar el sueño y disminuir la calidad del sueño en general. Además, el sedentarismo puede afectar el ritmo circadiano, el ciclo natural de sueño-vigilia, lo que puede llevar a trastornos del sueño.

¿Cómo solucionamos el sedentarismo?

Para combatir el sedentarismo, es importante incorporar actividad física en nuestra rutina diaria. Caminar a diario, hacer ejercicios de fortalecimiento, practicar deportes en equipo o hacer yoga/pilates, son solo algunas de las formas en que podemos hacer ejercicio regularmente. 

Es importante buscar la orientación de un profesional de la salud para ayudarnos a establecer metas y crear un programa de ejercicios adecuado a nuestra condición física y necesidades. En Plexum disponemos de profesionales fisioterapeutas y profesores de yoga,  pilates y ejercicio terapéutico que podrán indicarte la mejor forma de iniciarte en la actividad física.